







“ Si camino hacia adentro de mi
nunca veo el final de los senderos,
al contrario, se abren a cientos como las venas de mi cuerpo
dándome más vida.
De todos los caminos,
sin embargo, conozco la meta: es la luz,
transparencia inequívoca
que me permite avanzar
aún consciente de mi ceguera.”
Esta es una bonita descripción de lo que significa comenzar un proceso de terapia. Adentrarse en uno mismo y descubrir caminos que llevan a lugares nuevos, luminosos u oscuros, pero en los que en el final siempre hay una luz que no éramos capaz de ver al inicio. Puede ser una luz brillante, o una suave, pero nos muestra algo saludable que habita en nosotros y no lo sabíamos.
El mundo que nos está tocando vivir, siempre cambiante e inestable nos lleva frecuentemente a entrar en situaciones de conflicto que pueden llegar ser muy profundas.
Seguro que alguna vez te ha sucedido que no sabes para dónde tirar, ni que es lo que sientes y quieres. Es muy habitual no tener suficientes herramientas para gestionar lo que nos sucede. Los motivos son variados, nuestra educación emocional suele ser bastante pobre y las necesidades personales van cambiando en cada etapa y momento de la vida, por lo que nuestras herramientas aprendidas caducan con el tiempo.
Por eso es muy necesario, tomarte un tiempo para pensarte en compañía, para escucharte y escuchar, para sentirte y mirar la vida desde nuevos ángulos, y con nuevos ojos.
Para dejarte acompañar y cuidar, para aprender a conocerte y cuidarte. Para sanar heridas y sentirte cada vez más seguro en la propia piel y en tu pequeño o gran mundo vital.
Si esto es lo que sientes, que puede expresarse en forma de cansancio, falta de motivación, angustia, estrés o simplemente la sensación de que necesitas un cambio y no sabes cómo hacerlo, no dudes en pedir ayuda profesional.
Estoy aquí, y me he entrenado personal y profesionalmente para acompañar procesos de cambio vital y transformación personal.
Contacta conmigo y da el primer e importante paso hacia el cambio que es pedir ayuda y dejarte acompañar. El bienestar y el disfrute que encontrarás en el camino será la luz que te guíe.
(Poema de Begoña Abad. 2014)